Hola a todos, hace tiempo que no publicaba entradas, pero el otro dia me pasò un caso curioso.
Iba paseando con mi hijo de 11 años, cuando me dijo: papa porque no entramos en esa iglesia nueva que han construido en el barrio, yo le dije por supuesto, y fuimos a verla.
Yo no soy muy catolico pero siempre me han gustado mucho las iglesias, siempre me han parecido un sitio para meditar y encontrarse uno consigo mismo en paz creas o no creas lo que en ellas se practica, me encantaba su silencio, pero ese dia con mi hijo no pude estar dentro mas de cinco minutos en el silencio de su interior aparecian mis acufenos de una forma tan potente que no pude permanecer dentro, eso que estaban en una parte de ella diciendo misa y a pesar de ello no pude quedarme dentro en un sitio silencioso que me encantaba.
Es una anecdota de nuestro curioso mundo de los acufenos.
